San Vicente de Chucurí fue uno de los municipios de Santander que más ha vivido los estragos de la violencia en los últimos años, desde las repercusiones por el asesinato de Jorge Eliécer Gaitán, pasando por el surgimiento de grupos guerrilleros y la arremetida autodefensas y grupos paramilitares.
El Ejército Nacional creo la Casa de Memoria Histórica de San Vicente de Chucurí, un espacio que recopila narraciones de la guerra, sus víctimas y rinde homenaje también a los oficiales, suboficiales y soldados que entregaron sus vidas en defensa de esta región azotada por la violencia.
La historiadora Cynthia Maldonado Cruz afirmó que el proyecto nace a finales de 2016 y se consolidó en marzo pasado, donde comenzó la adecuación del museo y la recopilación de datos.
“Por medio de un grupo de memoria histórica del Ejército se realizó una investigación para recolectar la información. Se trabajó con información de Vanguardia Liberal en su mayoría, con publicaciones que van desde 1948 hasta 1995”, precisó la historiadora.
Maldonado aseguró que en esta labor se registraron aproximadamente 7 mil víctimas de San Vicente y Carmen de Chucurí, entre civiles y militares.
“La intención es visibilizar un espacio a estas personas y que sean reconocidas. Queremos hacer una reparación simbólica y que recuerden a los seres queridos que han perdido”.
El Brigadier General Elder Fernán Giraldo Bonilla, comandante de la Quinta Brigada del Ejército Nacional, expresó que lo importante es honrar la memoria del campesino, comerciante, agricultor y soldado porque ellos “tiñeron” la región con su sangre.
“Ese sacrificio se debe reconocer y lo reflejamos en este museo. Los frutos de esta idea se hicieron realidad. Por eso nunca lo vamos a olvidar”.
Giraldo Bonilla añadió que en el 2016 se hizo la entrega del municipio de San Vicente de Chucurí, como libre de sospecha de minas antipersonal. De igual forma, se está trabajando en el Carmen de Chucurí y se espera culminar la labor en el primer trimestre de 2018.
El militar concluyó que las nuevas generaciones deben conocer esta línea de tiempo. Además que es una tierra pujante y de desarrollo que ya se encuentra en paz. “Los campesinos pueden estar seguros de que pueden seguir cultivando en el campo, sin miedo a pisar una mina”.
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