El caso sucedió a las 3:30 p.m. del pasado sábado, en la piscina del balneario Villa Claudia, en la calle 37 con carrera 37A del barrio Yarima, comuna Cuatro de Barrancabermeja, Santander.
Según relataron sus familiares a esta redacción, el occiso el viernes había tenido una ardua jornada de trabajo, vendiendo zapatos deportivos en las calles del Puerto Petrolero, y con el fin de relajarse se reunió con dos amigos, para departir cerca de la casa de su abuela, en el barrio El Cerro, donde vivía pagando arriendo.
Sobre la 1:00 de la madrugada del sábado, uno de sus cinco hermanos lo invitó a que fuera a descansar, pero él quería seguir rumbeando.
Fue entonces cuando siguieron tomando y a las 3:00 de la tarde decidieron irse a darse un chapuzón al balneario antes mencionado.
“El administrador, que es rescatista, les dijo que no se metieran a la piscina. Los dos amigos hicieron caso, pero él no. Dijo que Jefferson se tiraba, nadaba y salía. Volvió a tirarse, pero no salía”, relató un allegado de la víctima.
Al parecer, el rescatista del lugar esperó unos minutos a que saliera Jefferson, y al ver que no sucedió, lo jaló con un gancho.
Pese a que le practicaron labores de reanimación, el joven de 28 años no reaccionó, por lo que fue llevado a la Clínica San José, en donde según fuentes médicas, llegó sin signos vitales.
VANGUARDIA